LÍNEAS TELÚRICAS Y GEOBIOLOGÍA. -Como nos influye la energía de la Tierra-

La Geobiología es la disciplina científica cuyo campo de estudios se centra en Las energías que emergen del planeta y estudia cómo afectan las redes Hartman y Curry a la salud y a la vida en general.

Estas energías o redes telúricas pueden potenciar o debilitar nuestra salud dependiendo de la exposición y tiempo a la que se someta un organismo.

¿Qué son las redes Hartman y Curry? 

Son líneas magnéticas que atraviesan el planeta y emiten una frecuencia que puede potenciar la enfermedad o la vitalidad, la perturbación o la armonía.

Las líneas Hartman deben su nombre al médico alemán Ernst Hartmann, quien detectó una estructura de radiaciones que se elevan verticalmente desde el suelo hacia arriba, formando una cuadrícula norte-sur llamada también red o rejilla.

Las líneas Curry las descubrió el investigador y médico germano-americano Manfred Curry. Estas forman también una cuadrícula, aunque tienen una separación mayor entre sí y están dispuestas en diagonal a las líneas Hartman.

Como utilizar las líneas telúricas a nuestro favor 

El espacio que queda entre una línea y otra está libre de perturbaciones, es decir sería una zona neutral. Y este sería el mejor lugar para pasar la mayor parte del día, ya que en la zona neutra no existe ningún tipo de radiación que altere nuestra biología.

Los cruces de líneas Hartman no son excesivamente peligrosos a no ser que se combinen con otro tipo de perturbación que amplifique la radiación, como por ejemplo que haya corrientes de agua subterránea.

En el caso de la red Curry, los cruces parece ser que sí tienen en sí mismos energías patógenas. aunque no solo por tenerlos cerca o andar por ellos vamos a enfermar, pero sí que hay riesgo cuando se pasa mucho tiempo sobre esa zona. 

El mayor impacto sobre el cuerpo es durante la noche, ya que al dormir nuestro cuerpo se encuentra en periodo de eliminación y desintoxicación, y nuestro cerebro está en frecuencia Alfa o Theta, por lo cual tenemos una mayor sensibilidad para captar las emisiones externas.

Los puntos más vulnerables de nuestro organismo son, entre otros, las glándulas endocrinas, que son las encargadas de mantener en perfecto estado nuestro sistema hormonal.

Señales de perturbación telúrica

Es muy efectivo guiarnos por los animales y/o por los niños, pues ambos tienen un sexto sentido para saber dónde hay un tipo de radiación u otra.

• Los perros siempre buscan zonas neutras para instalarse
• Las cigüeñas y golondrinas suelen hacer sus nidos en zonas neutras
• Los gatos tienden a buscar zonas de corrientes importantes de radiación (de ahí la creencia popular de que estos animales absorben las energías negativas)
• Las hormigas construyen sus nidos sobre cruces Hartman o Curry y normalmente cuando caminan siguen el camino de las líneas telúricas.
• Las abejas instalan sus colmenas en zonas de radiación telúrica

Los niños son una gran referencia también, tal y como demostró la maestra austriaca Kathe Bachler, detectan mucho antes que los adultos todo tipo de energías y radiaciones, expresándolo en forma de desequilibrios como

• Rechazo a ir a la cama,
• Sueño intranquilo,
• Pesadillas,
• Gritos,  
• Sudor nocturno,
• Cansancio y agotamiento por las mañanas,
• Falta de apetito matutino.

Herramientas para detectar zonas telúricas 

Según Daniel Rubio (psicoanalista e investigador) y Mariano Bueno del GEA (Asociación de Estudios Geobiológicos) “la energía es captada por el cuerpo directamente a través de los órganos, la glándula pineal y las suprarrenales” ” y podemos volvernos conscientes de esa energía a través de un medio como las varillas del zahorí o el péndulo, que nos permiten amplificar y captar la señal que el cuerpo recibe.

También con un poco de entrenamiento y haciéndonos más conscientes y sensibles a nuestra energía podemos utilizar los test musculares, que es una de las herramientas que se aprende en el Método AMVAL, con los cuales podemos detectar cualquier tipo de energía sin necesidad de ningún utensilio.

Conclusión

Una vez puesto de manifiesto que ciertos sitios potencian más que otros nuestro equilibrio físico y mental, tenemos la oportunidad de orientar nuestra existencia hacia un óptimo grado de energía y salud.